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Desde el Refugio el camino sube y pasa por un primer sector de matorrales de ñirres. En este sector hay que tener cuidado, ya que es fácil perder la ruta (hay varias flechas naranjas pintadas con spray que apuntan hacia el río, que NO se deben seguir). Dentro de las opciones en que uno se puede “perder” es llegar directamente al Salto del Indio. Tras unos 20 minutos uno sale de este primer sector de ñirres, siguiendo el sendero (en este sector es claro) para entrar en una planicie compuesta por arenilla y rocas arrastradas por el río y de derrumbes de los cerros del costado norte de la ruta. Unos 10 minutos más allá uno se encuentra con un cartel vacío, cuya información fue borrada por efecto del sol y la nieve.
[[Imagen:Panoramica - Valle del Indio 01 (piedra).jpg|thumb|200px|right|Ruta para no perderse, la cruz es la roca]]
Ya se divisa un nuevo sector de ñirres, que se debe tomar por el centro de éste. Hay una '''roca cuadrada''', casi como una mesa, en medio de un prado (podado religiosamente por caballos y vacas que merodean), con el río al costado derecho. Desde esta piedra seguir derecho hasta topar con el muro de ñirres y seguir hacia la izquierda. Tras unos metros encontrarán la pasada milagrosa a este laberinto de ñirres tupidos (yo me perdí en este sector cuando hice este trek). No les recomiendo tomarlo por el costado izquierdo (sobre la línea de los ñirres) o derecho (por el río), por que no verán donde el sendero continúa, perdiendo el punto de inicio de la cuesta hacia la Laguna de las Ánimas.
Tras salir de este matorral de ñirres el camino pasa por el lecho seco de un estero, llegando a otro matorral, menos tupido que el anterior. Desde el lecho seco del estero, mirando hacia el Cerro Tres Puntas, pegado a la ladera del cerro que esta hacia el nororiente, deberán ver un cartel que indica “Laguna de las Ánimas”. Desde el cartel, se deberían demorar unos 60 a 90 minutos en subir la cuesta (el sendero es claro), que tiene un par de descansos con vistas muy buenas del valle. En el portezuelo, puede que corra algo de viento.
La última parte del día es desde el portezuelo, bajando hacia la Laguna de las Ánimas, una notable laguna andina, con playas de arenas blancas que invitan a pegarse un chapuzón. Hasta este lugar, desde el Bolsón deberían ser 2 a 3 horas, dependiendo del estado físico y el cansancio acumulado del día.[[Imagen:DSC02729.JPG|thumb|200px|left|Laguna de Las Ánimas]]
===Día Dos===
El sendero parte desde el sector sur oriente de la Laguna, subiendo por unas sectores cubiertos en ciertas épocas del año de florecillas y pasto. Unos 30 a 40 minutos después de salir se llegará a un pequeño esterillo que cruza un gran prado, mientras desciende a gran velocidad por la pendiente. Tras este prado y uno 30 minutos mas tarde, se llegará a la cima de una loma, donde uno debiese divisar un estero ancho, pero poco profundo. Si o sí deben llenar sus botellas, ya que cuando crucen el portezuelo no tendrán agua por un largo rato.
Desde este punto, el sendero comienza a retomar la pendiente, apuntando hacia el sector norte. El sendero seguirá por grandes campos de piedrecilla volcánica de color casi blanco, una especie de piedra pome, manchada por piedras de un color café oscuro. Caminar por esta piedrecilla puede llegar a ser cansador (la cual será el escenario por varias horas de caminata), ya que uno se hunde en ella y refleja la luz y la radiación solar. Se deberían demorar cerca de una hora llegar al portezuelo, lugar donde tendrán una panorámica privilegiada de la Laguna Mondaca y de los glaciares del Volcán Peteroa. [[Imagen:DSC02743.JPG|thumb|200px|right|Vista de Laguna Mondaca]]
Desciendan del portezuelo siempre siguiendo las laderas de los cerros que tendrán a su costado derecho, siguiendo el sendero (se nota la línea y en ciertos sectores hay pequeños monolitos de piedras), sin apuntar en ningún caso hacia la Laguna Mondaca. La pendiente en algunos sectores puede llegar a ser pronunciada. Tras unas 2 horas llegarán a un riachuelo, que les parecerá un pedazo del paraíso dentro de este desierto volcánico, ya que la ribera está cubierta de flores de varios colores. Descansen en este lugar e hidrátense.
