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→Descripción de la ruta
Es una caminata muy hermosa, con una espléndida vista al Lago Llanquihue a nuestra espaldas, y pronto al Rupando y al Puyehue hacia el norte. Superado el tramo inicial de hielo, sigue un tramo amplio con pendiente bastante suave, pero de a poco esta va aumentando progresivamente. Ya cerca de la cráter, la pendiente es bastante alta, aunque sin requerir asegurar.
Inmediatamente debajo del cráter, está el tramo más complicado de la ruta. Las condiciones son cambiantes, pero en febrero de 2015 era posible enfrentar este obstáculo desplazándose un poco hacia el norte. Para una persona con alta confianza y provisto de piolets para frenar una eventual caída, es posible ascender sin proteger. Son solo tres o cuatro metros lo los más complicados. Una persona más insegura, preferirá clavar estacas de nieve y ascender provisto de arnés, para detener un eventual resbalón (no es necesario tornillos de hielo para este paso, aunque es deseable para un improbable pero posible rescate en grietas). También hay quienes sortean este obstáculo solo con bastones de trekking y crampones. En invierno o primavera, la gran cantidad de nieve hará menos expuesto este paso, y hará más prescindible el empleo de anclajes de algún cualquier tipo.
Una vez arriba del cráter, la superficie es muy plana. Se debe seguir avanzando hacia el este otros 270 metros horizontales. La cumbre misma, en el extremo este del cráter, es uno de los miradores más espectaculares del sur de Chile. Entre muchos otros, se observa el [[Volcán Puntiagudo]], el [[Volcán Puyehue]] y buena parte de la ruta del [[Lago Todos los Santos al Lago Rupanco por Termas del Callao]].
