Cambios

Sortear la reja (554m) y avanzar por un camino vehicular de ripio hacia los estanques de almacenamiento de agua (593m) donde se acaba el camino vehicular. Rodear los estanques y comenzar el ascenso de la ladera que está a nuestra derecha. En este tramo no hay sendero, pero la vegetación es dispersa, por lo que no hay problema. Se asciende firmemente hasta la [[Glosario#A|arista]] de la ladera, la que se alcanza a unos 720m, dependiendo del ángulo con que se atacó la ladera, y desde donde se puede ver por primera vez el valle de Santiago. Una vez en el filo, aparece un sendero relativamente claro, el que nos acompañará el resto del trayecto. Se sube sin descanso, en lo que constituye la parte más dura de la travesía. El sendero cruza numerosas veces el alambre de púas en mal estado que separa las dos laderas del filo. El filo comienza a torcer progresivamente hacia el noreste, y comienza a aparecer más vegetación. Hay tramos en que el sendero puede perderse brevemente, pero nunca deja el filo, por lo que resulta fácil reencontrarlo. Tras una cansadora hora y media (desde el paradero) se alcanza un nuevo filo (km 3,5, siempre desde el paradero del supermercado), con la hoya de la Quebrada Los Pozos (que desagua hacia La Pincoya) hacia abajo, y desde donde se puede apreciar por primera vez la mayor parte de la ruta de la [[Travesía del Guanaco]] hacia el este. El sendero sigue por la cota 1233m aproximadamente.