Circunvalación del Volcán Planchón - Cráteres del Volcán Peteroa
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Nota general
Esta ruta resulta difícil, cansadora y algo peligrosa. Sólo se recomienda a quienes gustan de los desafíos. Si sólo se quiere admirar los cráteres y sus fumarolas, resulta mucho más aconsejable abordarlos desde la ruta argentina, mucho más sencilla.
Acceso
Vehículo
Desde Santiago se debe avanzar por la carretera 5 Sur hasta la salida a la localidad de "La Montaña" (Ruta J 25), en el kilómetro 170. Se debe seguir por un camino en buen estado que conduce al paso Vergara, internándose por el valle del río Teno, en la Provincia de Curicó. En el kilómetro 75, 2 kilómetros pasado el puente Río Malo y 1 kilómetro antes del puesto de control migratorio, aparece la bifurcación hacia las "Lagunas de Teno", hacia la derecha del camino (245km desde Santiago hasta este punto). Son 12,56 kms de lento avance por este camino ascendente hasta una cabaña de los canalistas del Teno que marca el inicio usual de la caminata, aunque es posible avanzar un poco más en vehículo (ver mapa). Este ramal se encuentra mayoritariamente en regular estado aunque hay un par de secciones puntuales en mal estado. Sin embargo, con seguridad el camino estará cortado desde las primeras nevadas de mayo hasta fines de diciembre o enero, dependiendo del invierno.
Poco después de nevadas, ni siquiera será posible llegar a la bifurcación, pues la ruta internacional no es despejada y se cierra por la nieve hasta principios de verano.
Transporte público y autostop
No existe transporte público. Con autostop, sólo existe la posibilidad en verano de llegar hasta la bifurcación al ramal. De ahí hacia arriba será prácticamente imposible encontrar vehículos.
Descripción de la ruta
En caso de que no pueda avanzarse en vehículo por el ramal: Desde la bifurcación, pasado el puente sobre el río Malo (1800m), seguir el camino que se interna por el cajón de dicho río hacia el sur. Luego de 2 horas de marcha por la ladera este del cajón se llega a una choza de arrieros (6km), que inaugura un amplio sector de veranadas. El camino continúa internándose por la ladera este del cajón teniendo siempre un notorio morro como derrotero. Luego de 3h de marcha, se llega a los pies de éste (13km desde el auto), punto en el que se debe abandonar el camino que se ha seguido hasta allí, y que conduce a la compuerta (dique) de la laguna artificial oriental, y seguir remontando en dirección al portezuelo que separa el valle del río Malo del sector de la mencionada laguna. Poco antes del portezuelo, a 2617 msnm, se ubica un antiguo refugio (o bodega abandandonada, que probablemente dejaron las obras de construcción de las lagunas artificiales) de los canalistas del Teno, que está usualmente cerrado pero que en ocasiones es ocupada por los canalistas. Es el lugar habitual para estacionar si no hay nieve en la ruta.
Desde la cabaña (Km 0, 2.617m) son 10 minutos hasta el portezuelo (2688 msnm). Pasado el portezuelo se divisa imponente el volcán Planchón y una de las lagunas de Teno a sus pies. Desde el portezuelo se debe seguir directamente hacia la laguna. En invierno, se recomienda testear la calidad de la capa de hielo y, si esta es suficientemente gruesa, cruzar la laguna con dirección sur. El resto del año, la ruta discurre a lo largo de la ribera este, aunque varias decenas de metros más arriba que el espejo de agua. Como tercera alternativa, cuando el nivel del agua está particularmente bajo, lo recomendable es caminar por la playa que se forma). Una vez en el extremo sur de la laguna existe una gran playa.
En esta amplia playa se bifurca la ruta que va hacia la cumbre del Volcán Planchón. Para este traverse, se debe ascender directamente por la quebrada seca ubicada inmediatamente al sur de la playa. Es un ascenso pronunciado, que permite ganar altura con rapidez, desde los 2555 msnm de la Laguna del Teno hasta los 3030 aproximadamente, donde la pendiente se vuelve menos marcada y se alcanza una vista panorámica del macizo. Se debe entonces avanzar hacia el suroeste, en dirección al extremo oeste de la base del cono volcánico. No hay sendero claro, pero es terreno abierto y es fácil adquirir una orientación general. A los 3060 se hallan los restos de un aislante (colchoneta) amarillo, puestos allí para marcar la ruta. Más adelante, siempre en un espacio abierto, hay una zona de rocas grandes. Se debe continar rodeando el cono, y a los 3222 msnm, desde un espinazo que baja de la zona más alta del cono, será visible el valle del Río Claro. Se debe continuar traveseando por la ladera. Ahora el terreno es empinado y difícil, y vuelve la ruta poco recomendable para randonnée, pues en ese contexto esto sería un muy largo, agotador y difícil canteo. Más adelante, siempre traveseando, se debe pasar bajo farellones rocosos que, en pleno verano cuando no hay ya nieve, son peligrosas pistas de aceleración para una continua caída de piedras. Es peligroso, pero un poco menos de lo que parece, porque existe una gran distancia para verlas caer.
En el tramo final de los farellones, cuando ya la cara sur del Planchón comienza a esbozarse, se alcanza una quebrada cortada a pique. Se recomienda remontarla en dirección hacia el sureste. Luego se debe subir una empinada arista de roca. Desde el punto más alto de ésta, serán al fin visibles los cráteres humeantes en dirección al sur. Para alcanzarlos, se debe rodear lo más posible por el oeste la ladera de hielo que se extiende a nuestros pies. En pleno verano, ello implicará sólo pequeños pasos sobre hielo que no justifican llevar crampones. Una vez abajo, se debe avanzar 1,6 kms en línea más o menos recta hasta el cráter humeante. Avanzar en línea recta obliga a cruzar otro tramo de hielo plano, desprovisto de grietas y con tan poca pendiente que es posible llevarlo a cabo sin crampones. Luego el terreno se vuelve barroso, y una gran capa de material se adhiere a los zapatos. El cráter se ubica a 3440 msnm, y la vista es espectacular, con una caída vertical al abismo que humea.
Luego se debe desandar los pasos y avanzar hacia el paso que se divisa en el extremo este de la caldera, sorteando algunas lenguas glaciares sin dificultad. Ello permite admirar otros dos cráteres. Ninguno de ellos humea, pero el segundo cuenta con una laguna de color lechoso, y el tercero es el más profundo.
Una vez en el paso (3485), será posible observar un extenso paisaje hacia Argentina. La ruta más corta es también la más difícil: avanzar en línea recta hacia el noreste, cruzando tramos de hielo, pero ahora con pendiente. El autor de esta reseña realizó dicho cruce sin crampones, pero sin duda que contar con ellos aumenta la seguridad.
Luego sigue una larga caminata por las faldas orientales del Planchón. Resulta acá valioso contar con GPS, pues no resulta demasiado fácil encontrar la ruta óptima (por supuesto, no hay sendero de ningún tipo). Se debe armarse de paciencia para cruzar numerosas pequeñas aristas de roca, laderas de material suelto y campos de boulders. Al rato, el camino internacional y el Paso Vergara serán visibles en el fondo del valle. Tras una zona plana y de caminata agradable, se alcanza el hito fronterizo, a 2960 msnm. Muy poco después, viene una empinada ladera de material suelto y oscuro, que permite bajar rápidamente hasta la playa de la orilla sur de la Laguna del Teno. Desde ese punto, se debe rehacer la ruta ya descrita en la primera sección.
Recomendaciones
- Los bastones ayudan mucho en este trek, sobretodo en el traverse de la ladera oeste.
- El GPS resulta valioso para esta ruta.
Tiempo esperado
Considerar un día y medio. Es agradable acampar en la playa de la Laguna del Teno, pero ello obliga a una segunda jornada muy exigente. Si se quieren repartir las dos jornadas en forma más equilibrada, considerar que, si no hay nieve para fundir, no hay agua hasta la quebrada profunda.
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