Morro de Agua Fría
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Descripción General
Una ruta que transcurre por un antiguo sendero de pioneros, senda amplia y muy bien demarcada en su totalidad. Se asciende casi todo el trayecto bajo bosque nativo, llegando a la zona alta donde se pueden encontrar árboles de gran tamaño. El recorrido finaliza tras un corto descenso hacia una gruta con una imagen venerada por los arrieros, gruta situada en una amplia planicie con excelente panorámica de la cordillera hacia el Noreste.
Época adecuada
Se puede realizar en cualquier época
Acceso
En vehículo propio
Desde Curico tomar la carretera panamericana ruta 5 sur hasta cualquiera de los accesos señalizados a Molina, (rutas K25 o K19), pavimento en buen estado. Ingresando a Molina doblar a la derecha por la Calle Agua Fría, para tomar la ruta K 275 señalizada como Radal - Siete Tazas.
Seguir la K275, (pavimento en buen estado), durante 25 kilómetros, hasta encontrar a mano izquierda el desvío señalizado rumbo a Agua Fría, ruta K 175, de ripio en buen estado. Se avanza por esta vía aproximadamente tres kilómetros hasta pasar el Retén de Carabineros donde conviene reportarse. Unos doscientos metros después del Retén se cruza el pequeño puente Las Trancas y casi de inmediato se observa una casa a mano izquierda. Al lado de la casa se inicia la ruta
En transporte público y autostop
En la mayor parte del año solo existe un bus de acceso desde Molina hacia Radal a las 5 p.m. En verano aumentan los buses a varios por día en diversos horarios desde las 8 a.m. Se debe descender del bus en el cruce con la ruta K175, señalizado como Agua Fría. Desde allí se debe caminar o hacer autostop los aproximadamente tres kilómetros que faltan para el inicio de la ruta.
Descripción de la ruta
El sendero comienza por un tramo de pradera al costado derecho de la casa, cruzando dos portones de alambre en los primeros trescientos metros. Transcurrida esa distancia la senda se va internando en medio de arbustos de vegetación nativa, intercalados con algunos pinos. Aproximadamente a ochocientos metros del inicio se cruza una precaria vía que conduce a una propiedad privada, debe continuarse de frente la bien demarcada senda; cerca de un kilómetro después se vuelve a cruzar frente a un portón de acceso cerrado, después del cual ya la ruta se aleja de viviendas.
Se va ascendiendo en una pendiente muy suave por una amplia senda con algunos tramos muy pedregosos; hacia el costado izquierdo se puede escuchar un arroyo pero no hay acceso a él sino hasta el kilómetro 2.6, cuando se cruza su curso. Es un estero pequeño muy fácil de pasar sin mojarse los pies.
Aproximadamente setecientos metros después de pasar el arroyo la pendiente aumenta ligeramente mientras el sendero se interna un poco más en bosques nativos. La senda sigue siendo amplia, clara y pedregosa, con algunos atajos que ayudan a evitar la incomodidad de las piedras.
Al cabo de unos dos kilómetros y medio desde el cruce del estero, se sale a un pequeño sector de praderas con matorrales, donde en primavera se encontró un pequeño curso de agua, posiblemente seco en verano y otoño. Tras avanzar unos cien metros por la zona despejada, se llega a una bifurcación: debe seguirse el ramal izquierdo, que continúa el ascenso por la amplia senda pedregosa hasta alcanzar el punto más alto en poco más de un kilómetro.
Al llegar al alto se confluye con un amplio sendero que viene por la izquierda. Hay que cruzar al otro lado del cerro y seguir la senda que ahora comienza a descender en medio de un hermoso bosque donde predominan grandes coigües y robles. La senda continúa bastante amplia y definida, pero desaparecen las incómodas piedras del ascenso.
A medida que se desciende van apareciendo excelentes panorámicas de la cordillera. Poco después de un kilómetro de descenso se llega a un pequeño estero donde hay un excelente lugar para campamento. Pasado el campamento el bosque comienza a abrirse, dando paso a un amplio espacio con grandes lajas por las que va descendiendo el arroyo.
Continuando la senda pronto se alcanza una protuberancia desde la cual se observa una gran cruz, bajo la cual hay una gruta con una imagen de la virgen, venerada tradicionalmente por los arrieros de la zona. En esta amplia planicie regada por el estero y con una excepcional panorámica de la cordillera, termina la ruta.
Tiempo Esperado
Unas seis horas el recorrido completo
Permisos / Tarifas
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Esta ruta es gratis y no se requiere permiso |
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Aunque no hay control de ingreso, se recomienda avisar en la tenencia de Carabineros de Agua Fría, aproximadamente trescientos metros antes del inicio
Recomendaciones
- Checklist: Aunque sepas perfectamente lo que debes llevar, es preferible chequearlo al empacar. Esta ruta ha sido clasificada como Checklist de equipo tipo 1: ruta de baja altitud, sin acampe, nieve ni frío.
- Es mejor aprovisionarse de agua al cruzar el primer arroyo, es posible que no se encuentre más hasta el final de la ruta.
Galería de fotos
Cerro al sur del recorrido
Vista desde la pradera donde se inicia el último tramo de ascenso
Sendero en el final de la subida
Panorámica al Suroeste desde el ultimo tramo de ascenso
Bajando hacia la gruta
Descendiendo después del campamento
Panorámica de la cordillera vista entre el bosque
Arroyo descendiendo.
Llegando a la planicie
Descenso a la gruta
Gruta de la virgen venerada por los arrieros
