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→Acceso
Noviembre a mediados de abril. El resto del año es demasiado lluvioso y el camino se convierte en un barrial.
==Acceso== ===Carretera y llegada al Parque Nacional Puyehue===La ruta de Pampa Frutilla se encuentra dentro del Parque Nacional Puyehue, en la X Región.Para llegar al parque, hay que salir de la Ruta 5 Sur hacia el Este, a la altura de Osorno, y tomar la Ruta 215 (Osorno - Bariloche).Esta carretera, en muy buen estado, se caracteriza por sus paisajes típicos del sur chileno, con hermosos pastizales verdes, lomas, ganado y riachuelos, que no llegan a cansar la vista.Al cabo de unos 50 kms se llega al pueblo de Entrelagos, llamado así por encontrarse en medio de los lagos Puyehue y Rupanco. Los restantes 25 kms antes de ingresar al Parque Nacional, van bordeando la costa sur del lago Puyehue, de aguas tranquilas y cristalinas.Luego, la carretera comienza a tomar pendiente y en este tramo se encuentra en bastante mal estado.La carretera pasa por el medio del parque, y alrededor de 25 minutos después de haber dejado atrás el lago, aparecen letreros
==Descripción de la ruta==
El sendero parte desde Caleta Inío. Se debe caminar por las pasarelas hacia el sector de camping. Desde ahí -todo bien señalizado- parten los senderos de Quilanlar y [[Altos de Inío]]. El sendero comienza bordeando una cerca a lo largo de una turbera. Desde el primer momento son visibles los triángulos que marcan el sendero a tramos regulares (en este sector, compartidos con otros dos senderos). A los pocos cientos de metros, el sendero empalma con una antigua senda vehicular, utilizada para un proyecto forestal que (afortunadamente) no fructificó. Tras algunos cientos de metros, el camino (mucho más angosto) sube una cuesta de material suelto, entremedio de numerosas nalcas. En la parte superior de esta cuesta, se escinde hacia la izquierda el sendero de Altos de Inío, en tanto que el sendero a Quilanlar continúa por el ancho ex camino vehicular, hacia la derecha. Tras unos 20 minutos caminando por esta ancha senda, surge (señalizada) una bifurcación hacia la derecha. Ahora la ruta se vuelve una angosta huella que serpentea por la densa vegetación. Se debe continuar en dirección al noreste, por cerca de dos horas, hasta alcanzar el mirador del río Quilanlar. Es imposible perder la huella, tanto por lo denso de la señalización como por lo denso que es todo el terreno-no-huella. Desde el mirador del río, el sendero tuerce hacia el sur. Tras algunas cruzar algunas impresionantes pasarelas y un puente colgante, el sendero serpentea por áreas de cavernas y pronunciados desfiladeros cubiertos de musgo. Esta zona era habitada por los Chonos indígenas de esta parte de Chiloé. Tras cerca de una hora y media desde el mirador del río, se llega a la playa, junto a la desembocadura del Quilanlar.