Se toma el sendero cruzando casi inmediatamente un pequeño puente de madera sobre una quebrada, para comenzar un ascenso por un camino pedregoso bastante claro. Existen un par de bifurcaciones en la subida, pero siempre vuelven a confluir pocos metros después, de modo que puede tomarse el ramal que se prefiera. Tras unos 15 minutos de ascenso se llega a una curva donde se tiene la primera panorámica de la Laguna La {{Luspa. Allí termina la subida y el camino sigue en un suave descenso bordeando el cerro. Unos metros más adelante, se observa un claro de verde césped que interrumpe el pajonal. Debe buscarse un cruce de la cerca que se tiene a mano derecha, para bajar en diagonal por el cesped hacia el río que desciende de la laguna, buscando llegar a él más o menos arriba de un lugar donde el agua se bifurca en dos brazos que se observan desde arriba. En esta parte no hay sendero definido. Tras descender cruzando algunos pantanos se debe pasar a la otra orilla del río y buscar un sendero que sube paralelo al agua al comienzo, para ir poco a poco alejándose a mano derecha hasta confluir con un camino bastante claro, que viene bordeando la laguna por su margen derecha pero unos pocos metros arriba de su orilla.inicio}}
La senda sigue el borde de la laguna hasta más o menos la mitad de ella, donde hay una gran piedra que sirve como refugio del viento si se quiere parar a descansar un rato. Después de la piedra el sendero vuelve a ascender suavemente alejándose de la orilla, rumbo a la laguna Canutillos cuyo desagüe se observa claramente al fondo. En este tramo hay varios caminitos paralelos que suben, conviene tomar los más marcados pues tienen menos obstáculos.