Cerro San Pablo

El San Pablo es un hermoso cerro muy poco visitado, en parte porque, pese a su modesta altitud, requiere de varios días de caminata. La vista desde la cumbre es maravillosa, sobre todo en primavera, cuando aún existe abundante nieve. No debe engañarse por su aspecto, pues es una montaña cuya ruta más fácil cuenta con tramos de alta pendiente, que requieren de un delicado manejo de piolet y crampones.

Septiembre a mayo. En septiembre y octubre es muy, muy aconsejable llevar raquetas. No así llevar esquíes de randonnée, pues hay una larga aproximación a baja altura durante la cual habrá que cargarlos.

En vehículo

Desde Talca, avanzar por la ruta internacional CH-115 rumbo al Paso Pehuenche. Atento al cartel que indica el kilómetro 112, pues 600 metros después se cruzará el Estero del Valle. Pocos metros después del puente, existe una entrada vehicular al fundo El Médano. Se puede avanzar tan sólo 570 metros, para estacionar cera de la ribera Este del Estero del Valle.

En transporte público

Desde Talca, sólo hay buses hasta un pueblo llamado Aduana. Desde ahí, no es difícil conseguir autostop hasta el Estero del Valle, por lo que el cerro San Pablo es una de las pocas montañas de la cordillera centro-sur de Chile que se puede ascender con relativa facilidad con transporte público.

Perfil de ascenso al Cerro San Pablo

Aproximación por el Estero del Valle

Desde el estacionamiento (km 0 - 1158m), se puede bordear el río tan sólo 500 metros, pues luego la ladera rocosa cae a pique. Habrá que cruzar sacándose los zapatos (nota: si el Estero del Valle está muy crecido, cosa que se puede verificar al cruzar el puente de la ruta internacional, es preferible comenzar caminando por la ribera Oeste para evitar este cruce, pero es 1,1 kilómetros de caminata extra y no hay lugar para estacionar el vehículo en ese punto de la carretera).

Inmediatamente al otro lado del estero, habrá que estar atento a encontrar un snupie de piedras (waypoint "Desvío a cipreses"). Dado que poco más adelante es ahora la ladera Oeste la que cae a pique, el sendero remonta la ladera y avanza en medio de un cipresal, por una empinada ladera rocosa, y este snupie marca el inicio de ese desvío. Los primeros metros después del snupie es sumamente difícil seguir este tramo sin GPS. Si no se encuentra el desvío, se puede bordear la caída a pique de la ladera sacándose los zapatos (unos 30 metros de poca profundidad).

El tramo por el cipresal es muy bonito, traveseando por una empinada ladera de añosos árboles. Una vez que termina el tramo rocoso y los cipreses, la huella se pierde por algunos metros, pero es cosa de avanzar unas pocas decenas de metros hacia el Sureste hasta encontrarla.

Luego se baja, se cruza una puerta y se comienza a avanzar por el lecho del río. En breve (km 2,4 - 1258m) la huella vuelve a remontar la ladera por un breve trecho, para superar por arriba un socavón de grandes dimensiones. En este caso, se puede evitar subir y simplemente seguir por el lecho, pues esta vez no hay obstáculos.

Luego de eso, el sendero avanza claro y sin mayor novedad a lo largo del valle. Se cruzarán dos quebradas rocosas con cursos de agua, muy similares entre sí, en los kilómetros 3,0 y 3,8. Todo este tramo presenta numerosos cursos de agua menores que cruzan la huella.

En el kilómetro 5,2 (1388m) se cruza un estero caudaloso (sin nombre en la base de la DGA), que puede exigir quitarse de nuevo los zapatos.

En el kilómetro 7,4 (1529m) el sendero conduce al punto en que se debe cruzar al margen oriental del Estero del Valle. Es un cruce claro, muy notorio además porque inmediatemente después la huella gira a la izquierda y asciende bruscamente una ladera. En este caso (aunque no lo parezca desde abajo) el ascenso es imprescindible, y no se pierde ni un solo metro. Después la huella vuelve a girar a la derecha, en dirección a la cabecera del valle, y avanza por encima de las laderas que caen abruptamente al estero. En breve, el San Pablo ya es visible en el extremo Sur del Valle. Acá es fácil perder la huella, pero basta con avanzar a campo traviesa en dirección al San Pablo.

En el kilómetro 10,2 (1741m) se pasa por un antiguo corral de madera en mal estado, y luego se llega a una gran planicie, que marca el fin del valle. Hay numerosos pantanos, vegas y arbustos espinosos, y la huella se pierde con facilidad. Quienes no tengan zapatos de caña bastante alta, pueden preferir el uso de polainas en este tramo. El sendero se pierde con facilidad, pero el consejo general es buscarlo al pie de la ladera Este, unos pocos metros por encima de la planicie, donde el terreno está menos inundado.

Ascenso al San Pablo

Una vez al final del valle, seguir el estero, que gira gradualmente hacia el Suroeste, iniciando el ascenso al San Pablo propiamente tal. Preferir la ribera derecha, cruzando desde un comienzo (km 12,5 - 1840m). Habrá que superar los últimos bosquetes de arbustos espinosos (buscar huellas, las hay). El San Pablo se pierde de vista.

Una vez superada la ladera inicial, se apreciará lo que parece ser una loma aislada. Puede rodearse por el valle que la flanquea a su derecha o bien subirla, pues una vez arriba no se perderá ni un metro ganado. Seguir hacia el Suroeste, más bien alejado de las laderas más abruptas de la izquierda, y luego travesear rodeando la ladera, hasta pasar por una especie de pasadizo entre dos laderas y llegar así a una planicie (km 15,5 - 2580m). Si el ascenso se hará en cuatro días, este es un buen lugar para instalar el campo alto.

Desde esa pequeña planicie, acometer derecho la gran ladera ubicada al frente, de pendiente considerable (puede requerir crampones si la nieve está muy dura). Una vez arriba, se recuperará la vista al San Pablo, y ya es más claro lo que se debe hacer: apuntar hacia lo que parece ser un corredor a la izquierda del macizo (notar que el conspicuo morro rocoso se encuentra en un plano anterior al de la cumbre). La foto respectiva es en este caso mucho más clara que la descripción verbal.

Para llegar hasta ese "corredor", habrá que superar dos tramos de pendiente elevada, difíciles de superar con raquetas. Más adelante, se apreciará que lo que parecía ser un corredor en realidad era un pequeño paso (km 17,1 - 3060m). Una vez en él, habrá que bajar algunos metros y luego travesear hacia el Sur en dirección al gran canalón de la cara Este. Una vez en él (3110m), ascender derecho hasta su mismísimo remate final, en el filo norte del San Pablo. La pendiente es considerable, y, aunque no es necesario asegurar, los crampones son imprescindibles la mayor parte del año.

Una vez que se llega al final del canalón (3180m), se está en plena arista norte, en una "silla de montar". Sin embargo, una formidable formación rocosa impide seguir esta arista hasta la cumbre. En lugar de eso, hay que cruzar al lado opuesto y bajar unos pocos metros. Sigue a continuación una última ladera ancha de alta pendiente, que puede superarse por su sector más occidental (derecha) para disminuir la gradiente. Superada esa ladera, es cosa de caminar hasta de nuevo la arista norte, ahora perfectamente caminable, hasta llegar a la cumbre del San Pablo (km 17,9 - 3327m).

Tiempo esperado

Esta montaña puede ser realizada en tres días bastante intensos, y comenzando la caminata temprano el primer día, alojando en el estacionamiento la primera noche (notar que son cuatro horas en auto desde Santiago). Se debe tener buen estado físico para eso, y que todos los miembros lleven raquetas si se va en primavera.

Es más aconsejable realizar el ascenso en tres días y medio. El primer día, se puede comenzar la caminata a medio día o incluso a media tarde, para luego armar un campo alto en la segunda noche. El tercer día será de cumbre y descenso, idealmente más abajo que el campo alto. El cuarto día será de regreso, llegando al estacionamiento con tiempo de sobra para manejar varias horas si así se necesitara.

Para esta ruta, no existen obstáculos físicos en la entrada. Dicho eso, el cajón del Estero del Valle pertenece al fundo El Médano. Sus dueños permiten el tránsito siempre que el predio se trate con cuidado, no se realicen fogatas y se lleve de vuelta toda la basura. Es ideal solicitar permiso al cuidador del fundo, don Fernando, quien vive a unos 3 kilómetros del pueblo de Aduana, al Sur del camino internacional, un poco antes de los Baños del Médano.

• Al descenso, se recomienda visitar los poco conocidos baños del Campanario, para lo cual se debe ascender algunos kilómetros adicionales por la ruta internacional. Recomendable llevar traje de baño.
• Si no se quiere subir, también es posible relajar los músculos tras el esfuerzo físico en los Baños del Médano, con termas y saunas naturales (los vapores) ubicados poco más abajo que el Río del Valle, junto a la carretera internacional ($2.000 por persona). En este caso, eso sí, habrá mucha más gente.
• Notar que existe un camino de Minera Enerco que llega a más de 2500m, por el valle inmediatamente al oriente (ver waypoint respectivo). En caso de emergencia, es mucho corto llegar hasta ahí que volver hasta el punto de partida aquí descrito.

En el Fundo El Médano, que ocupa el valle colindante del Este, existe un camino vehicular que llega mucho más arriba, en el marco de operaciones mineras. Sin embargo no ha sido posible conseguir el contacto de los dueños para solicitar el acceso.

• 

  Cumbre del Cerro San Pablo. De fondo, el Cerro San Pedro. Sept/2016

• 

  Cara sur del Cerro Azul desde el Cerro San Pablo. Detrás, se alcanza a divisar también el Volcán Descabezado. Septiembre de 2016

• 

  Volcán San Pedro (der.) y Cerro San Pablo (izq.) vistos desde la ruta a la Laguna Manantial Pelado, diciembre de 2016.