Cerro Santa Inés

El Cerro Santa Inés es un área protegida muy particular. Se asemeja un poquito al Parque Nacional Fray Jorge, ya que en ambos se da un peculiar fenómeno muy atractivo: la formación de un bosque húmedo, semejante al bosque valdiviano, en medio de un entorno totalmente árido. La presencia de esta inusual vegetación se debe a condiciones topográficas determinadas que favorecen la condensación de la neblina costera en la parte superior del cerro.

Esta ruta señala uno de los diversos accesos a la cumbres del Santa Inés retornando por otra senda diferente. El sendero está perfectamente demarcado, aunque no existe una adecuada señalización que ayude a decidir cual senda tomar: de cualquier manera es fácil llegar al hermoso bosque, (donde predominan el boldo y olivillo), y posteriormente a la cima del cerro.

Además del inmenso atractivo del bosque en una zona semidesertica, si no hay neblina se pueden apreciar hermosas panorámicas del litoral y, (según los lugareños), en días muy despejados se alcanza a observar la cumbre del Cerro Aconcagua. Lamentablemente cuando se realizó la ruta, la neblina impidió casi cualquier panorama.

Se puede realizar en cualquier época

En vehículo propio

Desde La Ligua seguir la carretera panamericana, Ruta 5, hacia el Norte. Aproximadamente un kilómetro después del peaje de Pichidangui hay una pasarela peatonal e inmediatamente después una Copec a mano derecha. Dejar la carretera por el ingreso a la Copec, antes de la pasarela, y doblar a la derecha la esquina anterior a la estación de servicio, tomando la Avenida El Esfuerzo rumbo al Cerro. Subir por ella unas cuatro cuadras hasta el final del pavimento. Siguiendo el ascenso una cuadra más en ripio, se llega a un terreno baldío que sirve de estacionamiento.

En transporte público y autostop

Se puede tomar cualquier bus hacia Los Vilos. Descender en la primera pasarela después del peaje de Pichidangui (km 196 aprox), y seguir las indicaciones dadas en el item anterior.

Se toma la amplia y pedregosa senda que se observa subiendo en frente, hay varios caminitos paralelos que pueden ayudar a eludir el terreno muy erosionado. Hay que subir cerca de cuatrocientos metros hasta alcanzar una meseta dónde se debe seguir hacia el frente a la derecha, llegando en unos doscientos metros más a una vía vehicular, (en construcción cuando se realizó la ruta).

Se prosigue por la vía hacia la derecha unos trescientos metros, hasta llegar a un alambrado. La ruta continúa comenzando a ascender paralelo al alambre: hay sendero a ambos lados, pero en el recorrido realizado se eligió el que va después de cruzar el cerco. La senda sigue hacia un gran peñasco a media altura del cerro, (ver foto), y, aproximadamente doscientos metros después de encontrar el alambre, comienza a girar hacia la derecha, faldeando en ascenso para rodear el peñasco por ese costado.

El sendero es bastante claro, prosiguiendo el faldeo en una pendiente moderada mientras se observan bonitas panorámicas del litoral. Al cabo de unos seiscientos metros desde que se deja el alambrado, la senda se une a otra que viene subiendo. A partir de ese instante comienzan a aparecer esporádicas señales de piedra, indicando la ruta a seguir. La pendiente se incrementa comenzándose a ascender en forma más directa.

Unos doscientos metros después se dejó el sendero más demarcado, desviando hacia la izquierda por una senda más pequeña que pronto confluye con otra mayor. Se inicia un empinado zigzag mientras se va observando hacia abajo el peñasco que ya se ha sobrepasado. Aproximadamente medio kilómetro más tarde hay otra confluencia con un sendero, acercándose de nuevo al alambrado que se siguió en el tramo inicial.

Viene cerca de medio kilómetro más de zig zag acercándose y alejándose del alambre. La vegetación comienza a incrementar y transcurrida esa distancia se llega de improviso al bosque. El cambio es radical: desaparece la senda pedregosa y se entra en una sombreada y húmeda arboleda, con el suelo cubierto de hojas. El sendero se desdibuja un poco, pero fijándose bien se puede encontrar para seguir ascendiendo hacia la izquierda y, tras doscientos metros de avance, salir parcialmente del bosque para encontrar las antenas de la cima Sur.

Al llegar a este punto se puede superar el alambrado por una escalera y seguir una amplia senda por el filo para alcanzar las antenas de la cumbre Norte. Tambien esta la opción, de seguir un sendero que va bordeando el cercado, por entre vegetación con parches de bosque; esta opción figura en el track y se prefirió porque da protección del fuerte viento que suele existir en el lugar. Mientras se avanza se puede apreciar el denso bosque que cubre gran parte de la ladera Noreste del cerro.

Tras unos quinientos metros siguiendo la senda se llega al letrero que indica el inicio del Área Protegida Santa Inés. Se vuelve a ingresar al bosque denso y tras unos doscientos metros más se observó a la izquierda un pequeño sendero por el cual se ascendió hasta la cumbre Norte. Estos últimos cien metros no hay una senda totalmente definida, pero no hay obstáculos que interrumpan el avance.

Para retornar se siguió la misma senda hasta el bosque inicial, donde se continuó descendiendo por la senda más demarcada a la izquierda, que continúa un tramo más largo bajo los árboles, tomando el filo del cerro. Al salir del bosque se sigue el sendero por el filo hasta encontrar una señal de piedra dónde se debe doblar a la derecha y comenzar a bajar la ladera, (waypoint bif, foto presentación). Este sendero de descenso vuelve es menos empinado y erosionardo que el tomado a la subida y vuelve a reunirse con este último aproximadamente seiscientos metros más abajo.

Tiempo Esperado

Unas cuatro horas ida y regreso

• Checklist: Aunque sepas perfectamente lo que debes llevar, es preferible chequearlo al empacar. Esta ruta ha sido clasificada como Checklist de equipo tipo 1: ruta de baja altitud, sin acampe, nieve ni frío.
• LLevar agua, No la hay en todo el recorrido.

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