La Vertiente - Playa Caleuche

Una interesante y bonita caminata que parte desde una quebrada conocida como La Vertiente, (donde se forman hermosas cascadas en las ocasionales lluvias de la zona); y avanzando por el Cajón de la quebrada se interna entre coloridos cerros hasta la cima del más alto, desde el cual se observa una magnífica panorámica del entorno. El descenso se realiza buscando el cauce de otra gran quebrada que conduce a la Playa Caleuche.

Aunque una buena parte del trayecto se realiza sin sendero definido, los lechos de las quebradas ofrecen un terreno cómodo y fácil para transitar, con pocas posibilidades de perderse. Excepto el primer ascenso, un poco abrupto, el resto del terreno es bastante accesible. Las formaciones rocosas de las quebradas alternan el paisaje con las hermosas panorámicas desde los filos montañosos.

Se puede realizar en cualquier época. En verano tener en cuenta alta radiación solar.

En vehículo propio

Desde Copiapo se toma la carretera panamericana, ruta 5, hacia el Norte. Tras aproximadamente 160 kilómetros de pavimento en buen estado, pasando el poblado de Caldera y varios balnearios, se llega a Caleta Los Medanos. Menos de 5 kilómetros después, (poco antes del km 956), se encuentra un letrero muy notorio que señala un desvío a la derecha, indicado como La Vertiente.

Tomando este desvío se ingresa a un camino de ripio en buen estado, que termina en aproximadamente quinientos metros, en un amplio lugar donde se puede dejar estacionado el vehículo.

En transporte público y autostop

Desde Copiapó hay frecuentes buses hacia Chañaral. Descender después de La Caleta Los Medanos en el desvío señalizado como La Vertiente, poco antes del kilómetro 956. Caminar por la huella hacia el cerro cerca de medio kilómetro, hasta el inicio de la ruta., al final del camino vehicular.

Desde el estacionamiento sale una senda no muy clara que cruza la quebrada y enlaza con una senda que se observa en la ribera opuesta. En cien metros se alcanza este sendero y comienza un empinado y pedregoso ascenso bordeando el profundo cajón que se tiene a mano derecha.

Aunque el sendero es pequeño se puede observar claramente su trazado que durante quinientos metros sube casi trepando hasta el borde de la meseta superior. Una vez allí se debe buscar la continuación a mano derecha, descendiendo al lecho de la quebrada que ahora es bastante accesible.

En los próximos metros se trepa por algunas rocas en medio del curso seco de agua, tramo pequeño y nada complicado, antes de salir a un punto donde la quebrada se abre bastante. La ruta continúa siguiendo el cajón de la Vertiente durante un largo trayecto de subida imperceptible; aunque no hay una senda totalmente definida el lecho seco permite el avance cómodamente, formando casi una avenida en la que resulta fácil sortear los pequeños tramos rocosos, algunos de ellos bastante bonitos.

Se debe seguir siempre el ramal principal ignorando algunos afluentes. Tras casi dos kilómetros de avance por el cauce se llega a la confluencia de tres grandes brazos: debe tomarse el curso del medio, que es ligeramente más amplio que los otros dos. Siguiendo este lecho continúa el recorrido por la quebrada, que se encajona ligeramente sin obstaculizar el paso por ello.

Pasados los tres kilómetros y medio desde que se tomo el curso de la Vertiente, (4.2 desde el inicio), se dobla a la izquierda por un afluente menor. Se avanzan unos quinientos metros por su cauce y, cuando el terreno se abre y el pequeño afluente gira a la derecha, se debe doblar a la izquierda y comenzar a ascender hacia el filo de dicho costado.

Hay algunos esbozos de senda que suben, pero ninguno es muy definido, de modo que lo importante es alcanzar el mencionado filo en la forma que cada cual encuentre más fácil. En unos cuatrocientos metros se llega al filo por el cual debe continuarse, sin sendero bien demarcado pero sin mayores obstáculos, hasta alcanzar la cima del cerro.

Desde la cumbre hay una estupenda panorámica especialmente hacia el Suroeste, donde se aprecia gran parte del litoral, con diversas puntas y bahías. Hacia el Este el panorama es de cerros coloridos , hacia el Norte se observa el profundo cajón de una quebrada, mientras hacia el Este se aprecia el océano bajo el curso de la Vertiente.

Para descender se tomó un sendero que va faldeando el cerro ligeramente a la derecha del cerro. En algo más de trescientos metros se llega a un filo por el que prosigue la senda, ahora bastante clara aunque pequeña, continuando en dirección Oeste. A medida que se avanza se va observando ahora una excelente panorámica del litoral al Noroeste, donde se alcanza a vislumbrar incluso la isla frente al Parque Nacional Pan de Azúcar.

Antes de alcanzar el kilómetro por el filo, la senda comienza a desplazarse a la izquierda del cerro. En ese punto hay que buscar descender hacia la derecha, a la gran quebrada que se observa a dicho costado. Es difícil describir el punto exacto de iniciar el descenso, pero se puede deducir de la topografía del terreno, buscando el lugar donde la pendiente es más suave y el terreno más accesible.

El comienzo de la bajada es sin sendero, pero pronto aparece un esbozo de senda que ayuda al avance. Aproximadamente en cuatrocientos metros de descenso la ladera se va estrechando y se llega al filo de la arista, siguiendo el cual se puede continuar casi un kilómetro y medio hasta alcanzar el lecho de un afluente de la quebrada principal. Es un descenso ligeramente empinado pero bastante fácil, donde la senda no es muy definida pero siempre vuelve a aparecer un poco más adelante.

Una vez en el lecho del afluente es posible seguir por él hasta alcanzar la quebrada grande; sin embargo resulta más corto desviar a la izquierda donde un pequeño sendero sube la orilla del cauce secundario y continúa por una terraza ligeramente arriba del curso de agua principal. Esta senda transcurre recortando varias curvas y avanzando más de un kilómetro, hasta que finalmente desciende al lecho más grande al alcanzar otro afluente de considerable tamaño.

Apenas cien metros después de descender a la quebrada principal, se encontró el final de una huella para vehículos de doble tracción, (waypoint vía). En caso de tener quien vaya en su búsqueda, hasta allí podría llegar dicho tipo de vehículo. El track actual no sigue la huella vehicular sino que va recortando las curvas, avanzando siempre por el amplio y pedregoso lecho de la quebrada durante unos dos kilómetros y medio.

Transcurrida esa distancia se dobló a la izquierda en dirección a otra huella que se observa a ese costado. Se cruza otro amplio cauce y se llega a unas casas desde las cuales ya se alcanza un camino vehicular bien afirmado que en menos de un kilómetro desemboca en la ruta 5, a la altura de la Playa El Caleuche.

Tiempo Esperado

Unas cuatro a cinco horas el recorrido completo

• Checklist: Aunque sepas perfectamente lo que debes llevar, es preferible chequearlo al empacar. Esta ruta ha sido clasificada como Checklist de equipo tipo 1: ruta de baja altitud, sin acampe, nieve ni frío.
• LLevar abundante agua, no hay en todo el recorrido y el sol es intenso.
• El uso de bastones es recomendable ante el terreno suelto y resbaloso.

• 

  Tramo encajonado con algunos pozos

• 

  Llegando a la cima

• 

  Panorámica al Este desde la cima