Circuito Reserva Peralito

Se puede realizar en cualquier época. En verano tener en cuenta alta radiación solar.

En vehículo propio

En transporte público y autostop

El sendero es pequeño pero bastante claro, va ascendiendo rápidamente por entre pedregales, hasta llegar en aproximadamente seiscientos metros a una bifurcación. La senda más marcada sigue a la derecha, pero hay que buscar otro sendero que nuevamente sigue el cauce de la izquierda por unos pocos metros más. Cuando este sendero desaparece, se debe comenzar a ascender la ladera izquierda a campo traviesa.  

El ascenso no es complicado aunque no exista sendero, ya que el terreno es fácil de recorrer y la pendiente es moderada. Buscando el filo de de la izquierda, pronto se vuelve a encontrar una senda de guanacos, que comienza a enfilar hacia el Oeste. El sendero continúa faldeando cerros, mientras comienzan a verse excelentes panorámicas del litoral.

Al cabo de cuatrocientos metros la senda toma un filo donde se desdibuja su trazado. Se debe continuar por el borde hasta la punta final, excelente mirador a ambos costados. Se puede apreciar en frente la totalidad de la Playa El Refugio; a la izquierda el litoral y la carretera hasta la Punta; mientras a la derecha se alcanza a distinguir la costa hasta la isla frente a la Caleta Pan de Azúcar. Hacia el Este se observa la quebrada inicial seguida de numerosos cerros coloridos.  

Una vez en la punta se debe comenzar a descender sin sendero, buscando el terreno más cómodo y ligeramente a la izquierda. Se debe buscar interceptar un sendero que se ve claramente demarcado más abajo, y al cual se llega en cerca de doscientos metros se descenso. Es una senda pequeña pero clara que va cerca del filo de la izquierda hasta que comienza a perderse en un tramo muy pedregoso quinientos metros más adelante. 

Cuando el pequeño sendero va desapareciendo se debe bajar hacia otra senda que se observa abajo a mano derecha. Buscando el terreno más adecuado se baja sin mayores dificultades  a campo traviesa y en solo cien metros se alcanza la nueva senda que va internándose en una quebrada. Siguiendo este sendero se alcanza el lecho del nuevo cauce y se continúa bajando por él hasta que el terreno se abre, seiscientos metros después de tomar la última senda.  

Se debe entonces girar a la izquierda nuevamente y comenzar a bordear los cerros a ese costado. Rápidamente se intercepta otro sendero pequeño pero perfectamente demarcado, que va rodeando promontorios rocosos y descendiendo hacia la vía del comienzo, llegando en un kilómetro más a cerrar el circuito en el punto inicial.

Tiempo Esperado

• Ejemplo 1
• Ejemplo 2

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