Desde la laguna se debe volver a subir hasta el cartel que indica el camino a Enladrillado. Desde este punto, comienza una agradable caminata con poca pendiente, que cruza longitudinalmente la meseta de Altos de Lircay de oeste a este, a una altitud que fluctúa en torno a los 2150 msnm. Desde el cartel, se debe cruzar en dirección hacia el este la misma meseta que se cruzó antes de comenzar el descenso hacia la laguna, hasta llegar a una zona rocosa, en la cual se debe ascender por un zig zag hasta el punto más alto de todo el recorrido, a 2237 msnm. Desde este punto, la ruta bordea la meseta por su borde norte, con una excelente vista al valle del río Lircay. Luego viene una larga caminata donde se baja levemente, siempre con el volcán Descabezado y el cerro Azul como telón de fondo. Tras cerca de 3 horas desde el cartel (3 horas y media desde la laguna) se divisarán 3 carteles. Se ha llegado al pie de la planicie que forma Enladrillado, el extremo oriental de la meseta, notoria desde este punto por los bloques de roca que parecen desgajarse de esta curiosa formación geológica. El primer cartel señala la bifurcación hacia el camping (sendero que se deberá tomar a la vuelta de visitar Enladrillado). Seguir derecho algunos metros para subir a la planicie y disfrutar de esta especie de cancha de aterrizaje natural (y que ha dado pie a las más insólitas teorías sobre su formación). Es altamente recomendable caminar hasta el extremo oriental de Enladrillado y descansar al borde del acantilado que cae a pique hacia el valle del río Claro, desde donde se tiene una vista soberbia a las montañas antes mencionadas.
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