Valle del Río Claro (Maule)
|
|
|
Descripción General
Una interesante caminata, no demasiado exigente pero si muy hermosa, por un sendero de arrieros bastante claro que recorre la margen Norte del Río Claro, importante tributario del Maule.
El sendero transcurre gran parte bajo hermosos bosques, donde no es extraño observar los "tricahues", especie de loro muy vistoso y bastante bullicioso, propio de la región. Se tienen además bonitas panorámicas del Volcán Descabezado y de los imponentes cerros que enmarcan el Valle del Río Claro.
Época adecuada
Acceso
En vehículo propio
En transporte público y autostop
Descripción de la ruta
Se cruza el portón por un paso lateral para peatones, y se continúa por el camino vehicular pasando frente de varias casas. Aproximadamente después de un kilómetro empieza un hermoso bosque por el cual prosigue el camino, ahora ya un poco mas abrupto pero aun apto para 4x4.
Se deben ignorar un par de bajadas al río y continuar hasta el último descenso que termina en un pequeño canal. Se pasa el canal por un par de troncos y se sigue descendiendo hasta llegar casi a la orilla del río. Vienen aproximadamente dos kilómetros en que la senda se mantiene bastante cerca del cauce aunque unos cuantos metros por encima del nivel del agua. Poco después de pasar un viejo motor de aserradero abandonado, el sendero comienza a alejarse de la orilla ascendiendo entre el bosque
Doscientos metros después de comenzar a subir aparece una bifurcación, debe tomarse a la derecha un pequeño descenso. Se avanza faldeando el cerro bajo el bosque, con algunos ascensos y descensos cortos pero a veces pronunciados. Finalmente se regresa las cercanías del río y cinco kilómetros después del canal se llega a un viejo refugio de arrieros semiderruido.
Después del refugio el sendero asciende suavemente bajo el bosque, faldeando el cerro por unos 600 metros. Luego comienza a descender, acercándose cada vez mas hacia el río, hasta llegar a su orilla aproximadamente un kilómetro después de comenzar la bajada. Vienen aproximadamente dos kilómetros en que se avanza bordeando el río, a veces al lado mismo del cauce, y a veces apartándose ligeramente. En algunos tramos la senda pasa tan cerca del agua que es posible que en épocas de crecientes sea necesario mojarse los pies.
Pasada esta zona por la orilla viene un corto ascenso entre el bosque que desemboca en una amplia quebrada dividida en tres brazos, (sin agua en otoño). El paso de esta quebrada es largo, (300 metros! ) y sigue un curso un poco extraño: se cruza el primer brazo, a continuación se asciende unos 100 metros, se cruza el segundo brazo y se vuelve a descender otros 100 metros para finalmente cruzar el tercer tramo. Es necesario realizar estos giros para evitar las grandes piedras que obstruyen el paso; el terreno pedregoso hace un poco difusa la senda por lo que se debe estar atento a las pircas y demás señales.
A esta altura comienza a verse parcialmente, al frente a la derecha, el magnífico Volcán Descabezado. Pasada la quebrada se retoma el sendero que desciende 500 metros por el bosque para retornar a la orilla del río. Vienen doscientos metros de ruta muy estrecha, entre la pared de roca y el agua, donde en primavera es posible que sea necesario mojarse un poco; luego el terreno se abre y la senda comienza a alejarse del río volviendo finalmente a ingresar al bosque quinientos metros mas tarde.
Se avanzan cuatrocientos metros mas para llegar a la Quebrada Los Queñes, fácil de cruzar entre grandes piedras. Apenas se retoma el sendero, después de la quebrada, se encuentra un portón de alambre y doscientos metros después una casa de arrieros habitada.
Se debe rodear la vivienda por la parte superior y continuar hacia el final del potrero subsiguiente , dónde reaparece la senda. Esta desciende unos pocos metros y se bifurca; hay que seguir a la izquierda, el sendero que sube, ignorando el ramal que baja al río. Desde este punto en adelante el sendero es un poco menos notorio, con algunos troncos y ramas obstruyendo el paso, pero nada muy difícil de sobrepasar.
Se ingresa al bosque alejándose del río, subiendo y bajando y cruzando varios cursos menores de agua. Casi un kilómetro después del desvío se sale a una amplia meseta donde la senda se torna algo difusa. Debe seguirse la dirección que se venía, buscando al final un descenso a mano derecha que lleva hasta la orilla del río, donde termina la ruta.
Se tiene conocimiento de que cruzando el río es posible continuar hacia el Volcán Descabezado, aunque para ello no hay sendero definido. Es una interesante opción que no se llevó a cabo por estar el río crecido tras las primeras lluvias de otoño. Por tanto el regreso es por el mismo camino.
Tiempo Esperado
Permisos / Tarifas
Contratar Guías
Enlaces Externos
Recomendaciones
- Ejemplo 1
- Ejemplo 2