Carachula por Huasipamba
|
|
|
Descripción General
Una de las rutas más usadas para acceder a la fantástica Ciudad de Piedra, Carachula, es la que llega por el remoto caserío de Huasipamba: un sendero que, aunque no tiene señalización sino en el inicio y el final, está perfectamente demarcado y en la mayor parte del recorrido transcurre en una pendiente moderada, solo el descenso y posterior ascenso para cruzar el Río Mazucay presentan una mayor inclinación.
Además de las excelentes panorámicas del entorno, se sugiere en esta ruta un circuito para visitar la mayoría de las principales formaciones rocosas que conforman el espectacular conjunto de la Ciudad de Piedra.
Contexto histórico y cultural
El complejo de formaciones rocosas llamado Carachula, se considera uno de los últimos sitios de adoración de los primitivos habitantes, los cañari. Su nombre deriva de la expresión Cara - chula, que en el argot local significa Cara bonita. En realidad, desde el punto de vista geológico, el sitio se considera como una extensión del Macizo montañoso dónde se ubica el Parque Nacional Cajas.
El lugar también es conocido como "La ciudad de Piedra" por sus grandes paredes rocosas, formando laberintos y refugios, y su aspecto desde algunos ángulos puede asemejar una ciudad amurallada. Al respecto existe una leyenda local que afirma que pasada la medianoche del Viernes Santo, Carachula cobra vida durante una hora. Según el mito, si alguien se encuentra en el lugar en el transcurso de ese tiempo, terminado el lapso mencionado quedara para siempre formando parte de la ciudad, petrificado en una nueva figura rocosa
Época adecuada
Se puede realizar en cualquier época pero se recomienda en época seca: de Junio a Septiembre
Acceso
En vehículo propio
En transporte público y autostop
Descripción de la ruta
Desde el estacionamiento se debe devolver unos pocos metros hasta encontrar un amplio camino que sube; en este se encuentran los letreros que indican las posibles rutas a tomar. Para seguir a Carachula se debe doblar a la izquierda en un suave ascenso por una amplia senda; poco después de los cien metros de recorrido se ingresa a un bosque de pinos por el que prosigue la subida..
Aproximadamente quinientos metros después del inicio se sale a un parche de vegetación nativa donde la pendiente incrementa un poco: es un tramo corto, pues antes de doscientos metros termina el ascenso y se inicia una suave bajada. Se vuelve a ingresar a bosque de pinos y, poco antes de un kilómetro de recorrido, se cruza un primer puente, donde se reanuda la subida.
Antes de cien metros viene un segundo puente, mientras se sigue subiendo en una pendiente bastante suave durante trescientos metros más, hasta un tercer puente, pasado el cual se comienza nuevamente a descender. Poco después del tercer puente se sale de los pinos, a una zona de praderas y vegetación nativa al borde del sendero. Cien metros más adelante se cruza un cuarto puente y cuatrocientos metros después un quinto. Todo este trayecto se realiza en una senda muy bien demarcada, con una pendiente muy suave.
Unos doscientos metros más adelante del quinto puente, la senda inicia un descenso más empinado, mientras el sendero se torna pedregoso y un poco incómodo para caminar. Son cerca de seiscientos metros de bajada, hasta cruzar el sexto y último puente sobre el Río Mazucay.
Unos cien metros más adelante del río, hay un pequeño tramo que puede presentar inundacion: generalmente es posible atravesarlo por piedras sin necesidad de mojarse los pies. Terminando la zona inundada, se inicia un ascenso con una pendiente un poco más fuerte, también por sendero pedregoso. A medida que se sube la pendiente disminuye un poco, pero el ascenso prosigue casi un kilómetro desde el puente, hasta llegar nuevamente a una zona de pinos. Poco después se observan por primera vez las formaciones rocosas que caracterizan Carachula.
Vienen trescientos metros de suave bajada hasta cruzar un pequeño curso de agua, yse reanuda la subida. Unos doscientos metros más adelante se debe estar atento a un desvío a mano derecha, para subir hacia las rocas, que se alcanzan en solo cien metros más.
Circuito Carachula
Pasados los cuatro kilómetros de recorrido se llega al pie de las formaciones rocosas y aparecen las primeras señales. Hacia la izquierda una flecha indica “Sendero del Dinosaurio”, se eligió esta senda para iniciar un circuito por Carachula. Es un sendero pequeño que va subiendo entre bosque nativo, teniendo bastante cerca las paredes de roca hacia el costado izquierdo. Hay varios desvíos secundarios hacia ese lado, pero se ignoraron siguiendo siempre la senda más notoria. Desde el inicio se van observando interesantes y curiosas formas en las grandes rocas aledañas.
Tras unos doscientos metros de avance se cruza un alambrado, casi de inmediato debe girarse a la izquierda tomando un breve tramo de pradera. Son solo unos cien metros y se ingresa nuevamente al bosque, continuando una subida algo empinada. Aproximadamente medio kilómetro después de la flecha que indica el inicio del ascenso, se sale al filo superior del complejo rocoso, interceptando una senda que viene perpendicular.
Para proseguir la ruta aquí descrita se debe doblar a la izquierda, hacia la formación rocosa más apartada, que posiblemente sea la llamada “El tren”, (ya que no hay señales se deduce del esquema observado en un cartel). Tras unos pocos metros se empieza a bajar hacia la base de la roca, cien metros después se debe dejar la senda más amplia y doblar a la derecha por un obvio senderito que empieza a bordear la pared, ascendiendo por el lado de ella, hasta alcanzar el borde superior de la piedra.La senda sigue por todo el lomo de la formación rocosa unos cuantos metros, hasta llegar casi a la punta de ella, desde donde se puede observar una excelente panorámica del Valle del Río Mazucay en primer plano, valles y montañas lejanas, y de las formaciones rocosas aledañas.
Siguiendo el circuito se debe retornar hasta el punto donde se interceptó el sendero que venía por el filo, y continuar por él, ahora en sentido contrario, siguiendo todo el borde del cordón montañoso hacia las formaciones más conocidas de Carachula. Unos doscientos metros después del punto de intercepción, se pasa frente a la formación llamada “La Botella” , pequeña roca que hace honor a su nombre.
Tras “La Botella” la senda comienza a bajar siempre siguiendo el filo. Son doscientos metros de descenso seguidos de otro tanto de subida, por una senda pequeña pero clara, que ya se acerca al complejo rocoso mayor. Deben ignorarse algunos desvíos menores y continuar siempre por el filo del cerro, hasta acercarse a las grandes rocas. Llegando a ellas se debe tomar a la izquierda, donde la senda comienza a bajar a ese costado de la pared.
Antes de cien metros el sendero dobla ahora a la derecha, tomando una estrecha grieta que posiblemente sea el que en el esquema del lugar se ha denominado “El Túnel”. Vienen algo más de cien metros de brusco descenso en medio de las grandes paredes rocosas, cruzando al costado opuesto de la formación rocosa principal. Terminando la fuerte bajada la senda principal sigue bordando la pared, ahora por el lado derecho.
Es un tramo corto, que solo doscientos metros después de haber iniciado “El Túnel”, termina interceptando una senda amplia donde un letrero señala “Zona Arqueológica”. Llegando a esta senda se debe doblar a mano izquierda, llegando metros después al denominado “Centro Espiritual”: un agujero en la roca que forma una especie de embudo gigante en medio de las grandes paredes de piedra.
Siguiendo el sendero principal, en doscientos metros más se llega a una bifurcación donde debe seguirse el ramal que baja, señalizado como “Sendero Bolarrumi, Huasipamba”. Aproximadamente en otros doscientos metros se llega al sitio de inicio del circuito, donde debe iniciarse el regreso a Huasipamba.
Tiempo Esperado
Permisos / Tarifas
Esta ruta es gratis y no se requiere permiso |
---|
Recomendaciones
- Checklist: Aunque sepas perfectamente lo que debes llevar, es preferible chequearlo al empacar. Esta ruta ha sido clasificada como Checklist de equipo tipo 2: ruta de mediana altitud, sin acampe ni nieve, algo de frío.
· El terreno es bastante hùmedo, llevar calzado adecuado